DON QUIJOTE VIVE EN QUEENS… O DE CÓMO CONSEGUÍ UN TEATRO EN NEW YORK
Había oído hablar del Thalia Theatre a varios amigos. Gente de España y gente de aquí relacionados con el mundo del teatro. Sin embargo y paradójicamente nunca había ido a ver una función.
Traté durante todo el año de estar totalmente involved en la cultura estadounidense, de ser una auténtica brooklyniana, de asistir al BAM, y beber de Meredith Monk, Susan Lori Parks y Anne Bogart. De aprender de las fuentes que en España no están traducidas o de ver espectáculos que allá no llegan.
Y allá voy, tarde como siempre, a contarle mi rollo a ese señor que dirige el Thalia.
Ángel, afable, me abre la puerta. El Thalia es un espacio pequeñito, de 75 de aforo, una especie de teatro familiar con cientos de premios donde actúan compañías de todos los lugares del mundo. En Queens, Latinoamérica entera y Lorca y todo lo que quieras. Hablamos. Me cuenta cómo llegó a NY, sus musicales, el teatro, me cuenta su vida y Guatemala y yo le cuento de vuelta. Cómo llegué, qué quiero, qué sueño. Le hablo de mi Fuente Ovejuna en Juárez, de unir gente de distintas escuelas, de sobretitular la obra, de que de verdad de verdad, que yo no te doy guerra, que soy muy apañada.
Y Ángel que tiene algo de Quijote, de creer en las quimeras y trabajar en realizarlas, me dice que sí, chica, tengo el teatro libre en unas fechas, podríamos presentarlo como work in progress, podríamos coproducirlo dejándote el espacio para ensayar, y mi técnico de luces…
Quiero mariachis, Ángel, le digo, he visto que hay un Conservatorio de mariachis en esta ciudad que hay de todo. Qué te parece? Que las mariachis te las pongo yo, conozco a tres que son geniales, mujeres. Mujeres?? SIIIIIIIIIII.
Y yo salgo de allí, haciendo cábalas, juntando equipo, pensando, madre mía, madre mía, ahora va en serio:Vas a dirigir Fuente Ovejuna en Nueva York.