EN UN PLATÓ DE TELE…O EN UNA PELI CON ROBERT REDFORD
No gano para taxis. En Broadway levanto el brazo. Chelsea Market, en una mano un zumo de naranja en otro una cookie y el teléfono. Otro día más sin desayunar como una persona normal. Llamó, que llego tarde, para variar. Al llegar ya está Sergio. Casi no me dejan pasar, con estos mocos… Recorremos el pasillo de las oficias de New York 1, un canal de televisión. Allí tenemos una entrevista con el periodista de noticieros. Nos ponen el micro. Me siento, qué normal en Nueva York, dentro de una película. Al periodista le pasan por una pantallita la información de nuestro montaje, charlamos un poco antes, Sergio y yo estamos como flanes. La cosa dura 10 minutos y según nos vamos ojeamos la cantidad de cajas tontas que hay, la cantidad de cables, de mesas con periodistas que no paran al teléfono. Qué maravilla, no sé si estoy en Algo personal con el Robert Redford o en Todos los hombres del Presidente. El caso es que por un rato me he sentido con Redford.
Y tú, qué? que quieres vender la imagen de bohemio de Brooklyn con el gorrito? – le pregunto a Sergio.
No idiota, es que con la cresta que me has hecho hacerme, cualquiera sale así en la entrevista.
Y es verdad. Aunque luego viéndolo da igual, menudas pintas tenemos…
